Escuela Nº 109 de Tablada está tomada en reclamo por edificio propio

Estudiantes de la institución educativa de la localidad de La Tablada, mantienen la escuela tomada tras haber realizado dos movilizaciones y no obtener aún respuesta alguna de las autoridades.

Según manifestaron los alumnos a la concejala Sandra Oviedo, Libres del Sur-FAP, hace aproximadamente tres años habrían recibido la cesión de un terreno ubicado en las calles Ibarrola y Cerrito para la construcción de su edificio propio.

Asimismo, manifestaron que los funcionarios municipales que los recibieron les informaron que la construcción de esa obra estaría en manos de la provincia de Buenos Aires. Sin mayores datos y ninguna solución o compromiso concretos.

Concejala Sandra Oviedo, Libres del Sur-FAP, recorriendo las instalaciones

Salón de fiestas donde cursa la Escuela Nº 109

Mientras tanto, los jóvenes deben transitar su etapa de formación en la escuela secundaria en las instalaciones de la Sociedad de Fomento Pedro Casco, que les presta un salón de fiestas donde cursa  4º año. Quienes deben compartir los baños con el personal de una remisería lindante a la institución, que se cruzan en medio de cualquier materia. 

Baños sin puertas y rotos

Instalaciones que ellos mismo describen como inapropiadas,  “los baños no tienen picaporte y la electricidad no es buena”, explican.

Baños en mal estado

Los alumnos que están en 1º, 2º y 3º año, por su parte, cursan en las instalaciones de la EPB Nº 43. La presidenta del centro de estudiantes de la escuela 109, afirmó que "mantenemos el reclamo porque necesitamos un establecimiento donde esté el colegio junto, hoy, estamos separados. Está 1º, 2º y 3º año en un lugar y 4º y 5º en otro. No tenemos 6º año”, continuó.

Aula donde cursa  5º año, y sala de profesores

Un dato no menor es el modo de cursada que tiene 5º año, que asiste a sus clases en este reducido salón que refiere la imagen, que a contraturno a su vez funciona como la sala de profesores.

Con su voz en alto, los alumnos hasta ahora sólo lograron la instalación de un pizarrón en el salón de fiestas y que se mejoren los picaportes. Sin embargo, su lucha por el edificio propio continúa pendiente.